Quizás hayas elegido a tu banco de referencia en función de tus propios beneficios, circunstancias y necesidades, o simplemente porque tu empresa te lo impuso, por ejemplo. Cualquiera sea la razón, no deberías olvidar que los bancos, ante todo, son negocios.
Es por esta razón que este tipo de instituciones suelen ofrecer nuevos productos de forma muy accesible, pero esto no significa que sean los mejores. Hay que entender que siempre buscarán sus propios beneficios, y que aunque simulen una personalización, muy pocos tienen las herramientas para brindarte una solución a la medida de tu realidad y necesidades.
Junto al rápido proceso de incorporación tecnológica y la digitalización de este tipo de servicios, algunos aspectos se dejan de lado en cuanto a la confianza y seguridad de operar a través de las instituciones, y es necesario que tengas en cuenta algunos de estos puntos a la hora de elegir a tu prestador financiero.
La seguridad, ante todo
No cabe dudas de que la tecnología ha ayudado mucho en la experiencia de los usuarios en el sistema financiero. Pero esta nueva adaptación no debe ir en detrimento de la confianza y seguridad de que nuestros datos y cuentas están protegidas.
Nos hemos acostumbrado rápidamente a realizar de manera fácil transferencias desde nuestros celular, pero simplicidad no siempre equivale a seguridad. Todavía sucede, y muchos bancos aún trabajan en sus sistemas, que ocurran ataques tanto en las Apps de los bancos como en sus sitios, con el fin de robar información personal y el dinero de los clientes.
Te recomendamos que siempre lleves control de tu cuenta e historial de crédito. Por otro lado, no deberías proporcionar demasiada información personal a menos que sea estrictamente necesario. Y asegurate de que tu banco te exige la doble o triple autenticación para ingresar a la cuenta.
En este artículo podés informarte más sobre cómo estar protegido de fraudes o ciber ataques.
¿El producto que te ofrecen es el que realmente necesitás?
Cuando tenés que cambiar tu teléfono celular, por ejemplo, es muy frecuente que vayas directamente a la empresa que te brinda también el servicio de telefonía móvil. Y aunque la empresa te ofrezca muchas opciones y planes de pago tentadores junto a tu facturación mensual, esto no significa que no puedas comprar a precios más competitivos un aparato por tu cuenta en cualquier tienda o sitio online. ¿Has tenido en cuenta otras opciones a la hora de renovar tu teléfono?
De la misma forma, el banco siempre intentará vender sus productos, aunque no sean los mejores ni los más baratos. Por eso, una vez que hayas decidido adquirir un producto financiero (préstamos, hipotecas, garantías, etc.) deberías comparar con el resto del mercado para encontrar el mejor producto, con el mejor precio, y las condiciones más convenientes según tu realidad.
En TPI tenemos un producto para cada necesidad y nos nutrimos de las necesidades de nuestros clientes usuarios para crear el mejor servicio.
Por último, la presencia humana en este tipo de gestiones no puede faltar, porque cada persona tiene necesidades diferentes.
¿Tu banco te cobra comisiones cada vez que hacés una transacción?
Muchos bancos ofrecen cuentas accesibles, sin mínimos ni costos fijos, pero sin embargo le cobran al cliente una comisión por cada transferencia realizada. Aunque no sea significativa, hoy en día realizamos casi todos los pagos de forma online mediante transferencias, y el total de cada una de estas comisiones, puede llegar a ser muy alto.
Las comisiones también son una fuente de ingreso importante para cualquier banco, y muchos las cobran al retirar dinero, en cada uso de las tarjetas, y en todo tipo de transferencias.
Pero también hay bancos que no cobran ninguna o sólo en contadas excepciones, por eso es importante consultar estos detalles y buscar la institución que te permita la menor pérdida de dinero, especialmente por las gestiones que realizás comúnmente.
¿Tu banco te ofrece un crédito inmediato?
Hoy en día son muchos los bancos que ofrecen préstamos preconcedidos a sus clientes de forma automática, y sin comunicar los intereses o condiciones de aceptarlo.
También a la hora de solicitar o considerar la necesidad de una ayuda financiera, es necesario investigar el mercado y leer siempre la letra chica con las condiciones de ese préstamo.
Por otro lado, algunos préstamos bancarios vienen atados a “paquetes” que, aparte del préstamo (que era lo único que buscabas), te obligan a suscribir con eso a: abrir una cuenta corriente o caja de ahorro, sacar tarjetas de crédito o débito de los sellos internacionales más conocidos (gratis sólo por algún período), cobrar sueldos o remuneraciones, e incluso autorizar a que puedan cobrar el préstamo con el débito automático de esa cuenta.
No hay que olvidar que en la plaza uruguaya ya no existen los grandes bancos nacionales, salvo el BROU, que en otros momentos fomentaban el desarrollo nacional. Y muchos de los bancos privados más reconocidos hoy en nuestro país son, además, dueños de las financieras de préstamos más importantes.
Una vez más, es posible que ese producto que te ofrecen, aunque parezca accesible, no sea el producto más adecuado a tus necesidades y contexto financiero.
Como siempre decimos en TPI, antes de solicitar un préstamo, investigá, informate, y conocé los requisitos y alcances del producto que vayas a adquirir, con la garantía de que no habrá sorpresas o ataduras.
La confianza se gana y la seguridad se debe exigir. Y cuando se trata de nuestras finanzas, es de suma importancia encontrar la institución que cumpla con estas dos condiciones.