La Loog Guitar es la historia de una guitarra uruguaya que cautivó al mundo y obtuvo una rápida financiación internacional. Fue la tesis de un uruguayo concebida para iniciar a niños en la música que terminó en manos de un integrante de los Rolling Stones y hoy se vende en más de 30 lugares de Estados Unidos y en más de 40 países.
Esta es una historia de éxito, pero la realidad es que no todos los emprendimientos han comenzado y triunfado con sólo una gran idea. El mayor desafío de todo proyecto o emprendimiento es conseguir el apoyo, la financiación para prototipar o comenzar a desarrollar esa idea y, claro está, personas que crean en la viabilidad de ese sueño o proyecto para que no quede simplemente en eso.
Para quien desea emprender hoy en Uruguay hay a disposición una variedad de ayudas financieras para hacer despegar un proyecto. Porque todo negocio necesita de capital para iniciar o para crecer. Se trata de hacer cuentas, estimar nuestras ganancias futuras, para saber cuánto es el monto que necesito para salir adelante.
Pedir un crédito a un banco o a una casa financiera es la forma más común de obtener financiación para un emprendimiento. Hablamos de microcréditos o créditos de capital semilla que muchos bancos y casas financieras de préstamos otorgan (Ver: préstamos empresariales de TPI). Se tendrá en cuenta todos nuestros antecedentes o perfil de la empresa por parte de las instituciones a la hora de otorgar ese capital. Por otro lado, hay que chequear siempre las tasas y prever que nos costará más dinero aunque sea el modo más rápido y quizás el más accesible.
Pedir dinero a un particular es otra forma de obtener ayuda. Lo más común es recurrir a un familiar por la confianza que ya existe, pero también puede ser un particular tipo prestamista, un amigo o conocido. Por lo general, también se establece una tasa probablemente más competitiva que la de un banco y podemos hacer un cheque diferido con una fecha futura para el pago como compromiso de deuda. En caso de no tener cheques, se puede utilizar una garantía como una propiedad o un auto.
Otra alternativa es salir a buscar socios estratégicos de nuestro emprendimiento que aporten con inversión a cambio de un porcentaje del negocio compartiendo el riesgo. A veces estos socios pueden exigir únicamente retorno, y otra veces comprometerse con el proyecto y aportar desde su lugar y conocimientos.
También están los fondos de capital de riesgo, muy utilizado en empresas que están en procesos de expansión y requieren de inversión. Generalmente son gestionados por sociedades anónimas especializadas que invierten sus recursos financieros en las empresas con el objetivo de vender su participación en el futuro obteniendo beneficios de ello. En muchos casos están formados por empresas de capital privado, así como grandes empresas y bancos.
Por otro lado, están las incubadoras o aceleradoras que apoyan desde la mentoría y el asesoramiento financiero para hacer despegar una idea y validarla en el mercado, como la agencia estatal ANII (Agencia Nacional de Innovación e Investigación) o Ande (Agencia Nacional de Desarrollo), y otras iniciativas como Uruguay Emprendedor.
Están los clientes estratégicos, aquellos que compraron y creen en nuestro proyecto y se convierten en grandes colaboradores financieros, así como los inversores ángeles, grandes inversores que aportan sus contactos y conocimientos para ayudar a empresas a que tengan éxito.
El Crowdfunding o micromecenazgo es otra modalidad que aunque sigue siendo innovadora ya tiene varios años y cada vez más plataformas, así como muchos proyectos que se validaron y tuvieron éxito por este medio. Se trata de presentar una idea en una plataforma de donación para recibir apoyo de gente que cree en nuestro proyecto e idea y lo manifiesta a través de donaciones online.
Las alternativas de ayuda para sacar adelante un proyecto hoy son cada vez más y también más específicas, por lo que según el área de desarrollo y las necesidades de tu negocio, deberías evaluar dónde es más conveniente solicitarlo.
Grandes ideas que despegaron a partir de financiación
Muchos proyectos y emprendedores uruguayos de diversos rubros que obtuvieron apoyo de iniciativas estatales o privadas no sólo han sido un éxito y grandes referentes locales, sino también internacionalmente.
Rafael Atijas fue el creador de la guitarra infantil Loog, una versión del instrumento de tres cuerdas que ha estado en manos de artistas de todo el planeta.
Atijas recurrió a la plataforma estadounidense de crowdfunding Kickstarter, donde uno presenta una idea, la gente lo ve, y si le gusta, puede pre comprar lo que se ofrece antes de que exista. Más de 500 personas compraron la idea a partir de un simple prototipo y ahí empezó el éxito para la Loog. La primera campaña en 2011 debía reunir US$ 15.000 en un mes y logró llegar a US$ 65.000 con los que produjo la primera partida.
Para ese entonces, este tipo de financiación a través del crowdfunding era algo muy nuevo. Hoy en día, hay todo tipo de proyectos que recaudan millones de dólares allí.
Helpers, fue otra gran idea que triunfó con ayuda y financiación. Se trata de una red social de voluntarios que utiliza tecnología de ubicación para salvar vidas en caso de emergencia. Mediante la activación, la aplicación ubica a los “Helpers” más cercanos para que puedan socorrer a alguien en la zona hasta que llegue una ambulancia. El proyecto fue premiado internacionalmente como uno de los más innovadores en cuanto a impacto social.
La aplicación de Paganza es otro caso emblemático: una solución para el pago de facturas y gastos mensuales a través del celular o la web. Surgido en 2011, esta idea fue pensada en el contexto de la época cuando recién había un desarrollo del comercio electrónico y aún existían muchas trabas en los medios de pago. En 2012, con apoyo de la ANII en su convocatoria a Jóvenes Emprendedores, la idea finalmente se concretó. Ese mismo año también obtuvo financiación de inversores ángeles de Uruguay, y en el 2013 varios premios a la innovación, y uno de sus directores, Marcelo Lanfranconi, fue reconocido en la edición del MIT Technology Review en la categoría de innovadores menores de 35 años. Además, llegaron a operar para realizar transacciones con importantes bancos internacionales.
Otra de las ideas que terminó siendo una de las empresas de mayor impacto y crecimiento fue Pedidos YA. Hoy en día, una de las mayores tecnológicas del mundo que comenzó combinando una idea de jóvenes estudiantes con apoyo estatal y capital privado que aceleró su crecimiento. En 2011 obtuvieron apoyo de un grupo de inversores para expandir el negocio, y el siguiente gran paso fue en 2017 cuando la alemana Delivery Hero compró PedidosYa y a partir de esta alianza la empresa comenzó a cotizar en la bolsa. Hoy cuenta con un equipo de 2000 empleados de forma directa, sin considerar a sus repartidores.
Durante años la compañía basó su negocio en la intermediación entre clientes y restaurantes y luego migró de un sitio web a una app. Hoy, el 90% de las transacciones de la compañía se realizan a través de dispositivos móviles. Y la mayor innovación ocurrió hace tres años, cuando PedidosYa amplió su rol e ingresó en el segmento de la logística.
“El tren pasa solo una vez. Uno decide si subirse o dejarlo pasar. Siempre es el momento para hacer algo cuando uno realmente lo sueña y lo desea con total convicción”, es el consejo de uno de los socios y co-fundadores, Ariel Burschtin.
En TPI también creemos en tus sueños y proyectos, por eso podés solicitar un crédito para todo tipo de necesidades financieras como la apertura de tu negocio, la compra de equipamiento, una reforma estructural, actualización tecnológica, y todo lo que contribuya a la mejora de la competitividad de tu empresa, así como para hacer despegar ese proyecto pendiente.
Ponete en contacto para recibir información y asesoramiento financiero para tu emprendimiento.